Monday, January 7, 2013

Lo fácil y lo correcto.

Diariamente, a veces, muchas veces, otras pocas nos encontramos en la situación en la que nos quejamos que algo no esta bien, solamente por el hecho de que es difícil y el hecho de esforzarnos lo hace incorrecto.

Es inicio de año y es tiempo de dejar de poner excusas, de enojarnos por que nos digan nuestras áreas de mejora, porque seamos honestos con nosotros mismos, de aceptar nuestros errores.

Dicen por ahí que toma 21 días formar un hábito, pues yo creo que eso es estúpido. Creo que formar un buen hábito es algo mental y voluntario y automático. Muchas veces me encuentro en ese espacio entre lo fácil y lo correcto diariamente.

Lo fácil es fumar, ser un adicto a la nicotina, desgastar mi salud, y en un par de años desarrollar enfermedades y ya todos sabemos la historia.

Lo fácil es tomar soda, café, refrescos y alcohol en cantidades que nos dañan nuestro organismo.

Lo fácil es ser gordos, es tener sobrepeso, es comer y comer como si no hay mañana, sin pensar en las consecuencias para nuestro organismo y para nuestro futuro.

Lo fácil es ser un pendejo con un poco de paciencia cuando esta sobre mucha presión.

Eso es lo fácil, lo simple, las excusas van de la mano con lo fácil.

Lo difícil no es dejar de fumar, no es dejar de tomar y comer cosas que nos perjudican diariamente, lo difícil no es comer saludable. Lo difícil somos nosotros con nuestra pobre voluntad de no hacer las cosas, lo difícil somos nosotros con nuestra baja autoestima al no creer que tenemos el poder de lograr cosas impensables.


Cada día es mejor levantarse de buen ánimo y pensar que cosas buenas pasarán. Si te das cuenta que para el final del día andas todo amargado, piensa si has dormido bien, puede ser la razón de tu ánimo tan poco amigable. No te descargues con los demás por tus presiones, mejor recuerda que todos tienen una vida y que tienen responsabilidades.

Piensa en lo correcto que será más gratificante al final del día y en tu vida y deja a un lado lo fácil que es el camino de los pobres de voluntad y de autoestima.




Thursday, January 3, 2013

Abuso, conformismo y más abuso.


Mientras la población salvadoreña no reaccione todos los abusos por parte de políticos, transportistas y empresarios van a seguir en su rutina con todo la seguridad de hacer lo que quieran sin ningún problema. 
Cada día nos damos cuenta que los más afectados somos el pueblo, todos somos afectados, clase baja, media o alta. 

Con esta crisis del transporte el gobierno podría al fin cambiar y revocar los permisos de circulación. Como salvadoreño al que me descuentan mensualmente de mi salario impuestos, así como ustedes, pago ese subsidio. Estoy pagando un servicio de mala calidad, que daña el medio ambiente con las enormes cantidades de humo que emanan día a día esas unidades, que para este tiempo deberían de ser todas modernas según los acuerdos para que les den el subsidio; estoy pagando maltrato de parte de motoristas y cobradores, estoy pagando accidentes y tragedias viales causadas por la excesiva velocidad e imprudencia de parte de ese sector tan privilegiado como lo son los empresarios corruptos y consentidos del gobierno: Los transportistas.

Estoy de acuerdo en que se hagan licitaciones a empresas FORMALES y NO corruptas como la de muchos transportistas que se atreven a ofender al pueblo, salvadoreños que hacen que su negocio sea rentable. Me duele ver como el pueblo siempre tiene que salir sobrando cuando somos nosotros los que movemos la economía.
Esta situación seguirá igual, ya sea con los políticos corruptos, con los transportistas, o con los empresarios siempre pagando el mínimo y explotando más al pobre. Mientras el pueblo no actué NADA va a cambiar. Lo he dicho y lo repito, es tiempo de dejar de quejarnos y empezar a actuar.

Países desarrollados como España dan el ejemplo cuando millares de habitantes protestan, la primavera árabe que inició en el 2010 y se sigue dando en países en los que la represión están a la orden del día, personas valientes y conscientes de sus derechos han actuado para cambiar su realidad.

Sentados y criticando no vamos a lograr nada. Es tiempo de darle un nuevo sentido a la revolución, creo que seguimos con el concepto que revolución es guerra, revolución es cambiar nuestra realidad, desde nuestras vidas personales hasta la realidad de un país completo sin necesidad de violencia, pero con inteligencia y unidad nacional. Revolución es dejar de cortar árboles y empezar a sembrar árboles, revolución es despertar del letargo y decir NO a los políticos corruptos, decir NO a los abusos por parte de transportistas, decir no y empezar a actuar.