El Salvador: La Juventud ¿Mediocres o Revolucionarios?

El desarrollo de la democracia y de El Salvador depende de nosotros, no de los políticos.

Si se quiere un cambio se tiene que trabajar por el, no solamente quejarnos, o que todo se quede en ideas.
Debemos dejar la mentalidad mediocre y retrógrada de: "Mientras yo haga lo que quiera, y no me molesten no me importa" que tenemos, cuando en realidad todos queremos un lugar mejor para vivir, y cuando se atropellan nuestros derechos solo nos quejamos pero no hacemos nada al respecto.

A veces nos quejamos de nuestra situación de vida,  deberíamos de pensar y analizar si hacemos algo por mejorarla y cambiarla; o si somos unos mediocres y sabemos que la podemos mejorar y no hacemos nada.

Ser mediocre nunca ha llevado al éxito a nadie, ni a los más equivocados tiranos dictadores, ellos tuvieron éxito porque trabajaron en lo que creían e hicieron una revolución, una revolución errónea pero la hicieron, y lograron el apoyo que necesitaban para tener éxito.

Es tiempo de dejar de quejarnos y hacerlo. Tu situación personal, el dinero, la universidad y el trabajo deberían de motivarnos a hacer el cambio, no a excusarnos de trabajar por el.

El Salvador necesita gente y jóvenes con energías muy bien enfocadas para lograr un cambio positivo. El Salvador no necesita jóvenes enfocados en vivir, respirar, trabajar y morir. Sin propósito alguno más que procrear, tener relaciones sentimentales y no avanzar.

No se sacrifica nada con participar en una buena causa, la satisfacción personal en saber que fuiste parte de un movimiento de cambio te traerá satisfacción personal. Pero no todo termina solo con participar en una campaña de limpieza, en construir una casa o ir a una protesta, se trata de ser un agente de cambio y mantenernos en constante revolución y evolución.

"Ser joven y no ser revolucionario es una contradicción hasta biológica" Salvador Allende